En un mercado laboral que se achica, muchas veces por responsabilidad de la tecnolog\u00eda, hay muchos j\u00f3venes que encontraron la posibilidad de ver una salida laboral en lo que para ellos arranc\u00f3 como un pasatiempo.<\/p>\n\n\n\n

Estamos hablando de los eSports o deportes electr\u00f3nicos que ya mueven millones de d\u00f3lares en el mundo y est\u00e1n atrayendo la atenci\u00f3n de much\u00edsimos m\u00e1s espectadores que varios deportes de los llamados tradicionales.<\/p>\n\n\n\n

Se estima que el sueldo medio de un jugador profesional ronda los 3.000 \u00f3 4.000 d\u00f3lares mensuales, unas cifras muy alejadas de las que se pagan en otros pa\u00edses como Corea del Sur, EEUU o China, donde m\u00e1s se invierte en esta industria y de Sudam\u00e9rica, en la que todav\u00eda es una actividad que est\u00e1 en v\u00edas de crecimiento.<\/p>\n\n\n\n

En los \u00faltimos diez a\u00f1os ha crecido tanto que los equipos han pasado de ser sencillas organizaciones a clubes profesionales. Son empresas complejas y estructuradas que atraen a patrocinadores, los que en un principio eran marcas relacionadas con la industria simplemente porque era un nicho. Y hoy por hoy ha llegado a marcas multinacionales que comienzan a darse cuenta que all\u00ed est\u00e1n los j\u00f3venes que ser\u00e1n los consumidores del ma\u00f1ana. <\/p>\n\n\n\n

Lo que naci\u00f3 como un grupo de amigos jugando en un ciber caf\u00e9 para pasar el tiempo se fue profesionalizando y hoy los equipos se han convertido en estructuras deportivas comparables con cualquier club del mundo. Es que ya no est\u00e1n formadas s\u00f3lo por jugadores, sino que hay una directiva que se encarga de conseguir todo el dinero necesario para la mantenci\u00f3n de la estructura, pero tambi\u00e9n entrenadores, analistas, psic\u00f3logos, m\u00e9dicos y hasta se ha profesionalizado algunas actividades sat\u00e9lites como los comentaristas y todo lo que tiene que ver con la prensa. <\/p>\n\n\n\n

En Argentina seguimos mirando con recelo la actividad, pero en el resto del mundo ya se lo toma como una profesi\u00f3n y se trabaja para que los j\u00f3venes se formen dentro de la misma. <\/p>\n\n\n\n

De hecho, en Oriente, lugar en d\u00f3nde m\u00e1s arraigado est\u00e1 este nuevo germen, los universitarios ya pueden matricularse en carreras relacionadas con ello. La iniciativa corri\u00f3 como reguero de p\u00f3lvora y lleg\u00f3 hasta Occidente y m\u00e1s precisamente a las prestigiosas casas de estudios de los Estados Unidos. Harvard y Miami, por citar algunas, ya dictan posgrados sobre el tema y hasta existen las universidades que comenzaron a dar becas para aquellos jugadores que se destacan y puedan representarlas en las distintas competencias, c\u00f3mo hist\u00f3ricamente pasaba con los deportes tradicionales como el b\u00e1squet, que c\u00f3mo todos conocemos, cuenta con un sistema de draft (elecci\u00f3n) en el que los equipos profesionales eligen a los universitarios m\u00e1s talentosos y los convierten en profesionales.<\/p>\n\n\n\n

Ac\u00e1 hay que tener en claro que los eSports no son lo mismo que videojuegos, porque los primeros cumplen con los requisitos de tener una competencia organizada y sistem\u00e1tica. En este caso podemos citar a t\u00edtulos como League of Legends o Counter Strike y el reciente ingreso de Fortnite, el juego en el que un chico argentino de 13 a\u00f1os se gan\u00f3 casi un mill\u00f3n de d\u00f3lares de premios y puso el tema en el tapete.<\/p>\n\n\n\n

Un claro ejemplo de que lo que para otra generaci\u00f3n era un simple diversi\u00f3n y\/o una p\u00e9rdida de tiempo seg\u00fan del lado y del fanatismo que se tuviera, pas\u00f3 a ser un deporte y hoy por hoy la puerta para una lujosa forma de vivir. Una de esas raras profesiones nuevas que d\u00eda a d\u00eda atraen a los j\u00f3venes.<\/p>\n\r\n